¿Hay algo que te preocupe?
En esta sección trataremos de dar respuesta a las principales dudas que puedas tener. En nuestro dojo una de las principales premisas es hacer que te sientas cómodo y no queremos que te quedes con dudas o preguntas sin resolver. Por eso, si, no encuentras la respuesta adecuada a tu duda o problema te animamos a que nos las hagas llegar por correo electrónico a la siguiente dirección de correo electrónico: mushinkan@movistar.es
Esperamos que esta sección te sea de utilidad.
¿Se puede probar la actividad antes de apuntarse?
Por supuesto que sí. Es más, te recomendamos que antes de completar tu inscripción vengas al dojo y pruebes Tres Días de Clase GRATIS, sin ningún tipo de compromiso por tu parte. Sólo si te gusta la actividad, te inscribes.
¿Necesito algún material para comenzar?
No, no necesitas ningún material concreto para empezar a entrenar con nosotros. Pasaté por el dojo lo más cómodo y fresco posible; por ejemplo con un pantalón de chándal y una camiseta de algodón y ponte a entrenar, aunque preferiblemente rogamos que la ropa sea en colores oscuros (negro o azul marino) y sin estampados chillones para mantener una cierta uniformidad.
Para la práctica del iaïdo es recomendable que traigas un par de rodilleras. Si no tienes, pídeselas al instructor.
Del resto, no queremos que te preocupes; el dojo tiene material para prestarte durante tus primeros pasos, mientras te haces con tu propio equipo.
Es que ya no soy tan joven y hace mucho tiempo que no hago deporte ...
La edad no tiene que ser una merma para realización de cualquier actividad de artes marciales. Adecuando los contenidos prácticos a las circustancias personales del alumno nuestros instructores pueden impartir clases a personas de prácticamente cualquier edad.
Por otro lado, es cierto, que cada vez más la vida sedentaria y los ritmos freneticos a la que estamos acostumbrados en nuestra sociedad no nos permiten gozar de estar en plena forma. Pero muy al contrario, este hecho no debe ser una justificación para no entrenar, sino una motivación más para comenzar a hacerlo. Si entrenas regularmente irás adviritiendo como, sin que te des cuenta, se acrecienta tu fuerza, velocidad, resistencia y flexibilidad.
¿Es necesario un certificado médico para practicar las actividades del dojo?
Normalmente no se requiere ningún certificado médico para practicar con nosotros. No obstante antes de empezar a entrenar , es necesario que en el caso de tener alguna lesión (muscular o articular) de importancia o si padeces alguna dolencia o enfermedad como diabetes, asma, tiroides, hipertensión, alérgias o problemas cardiacos lo pongas en conocimiento de los instructores del club, que estudiarán tu caso con la más absoluta confidencialidad.
Únicamente después de haber evaluado la situación, y si así lo considerase oportuno el club, se te podría solicitar un certificado médico en el que conste que puedes practicar en nuestras actividades.
Es más importante prevenir que curar. Por eso cualquier lesión o enfermedad, por muy insignificante que te parezca debe ser informada a los instructores del club.
Es que nunca he practicado artes marciales ...
Nadie nace sabiendo. Y en el iaïdo, como en otras artes marciales y como en muchas otras cosas en la vida, el único secreto es practicar, practicar y practicar.
¿Y que beneficios obtengo con las artes marciales?
Al margen de otros beneficios más intrínsecos, la práctica de cualquier arte marcial nos reporta los siguientes beneficios:
Desde un punto de vista de los beneficios físicos, se pueden observar como se mejora el tono y la potencia muscular, el sistema endocrino y el equilibrio. También se produce un aumento de la elasticidad y la flexibilidad, asi como de la velocidad y la resistencia.
También se aumenta la capacidad de concentración y el sentido de alerta, asi como se fomenta la autodisciplina, el respeto a los demás, la humildad, la cortesía y la generosidad.
Pero quizas el aspecto más importante es el beneficio social, ya que un verdadero artista marcial nunca es pendenciero, todo lo contrario, gracias a la concentración y al entrenamiento adquiridos puede reconducir situaciones agresivas, respondiendo físicamente y con la justa medida, y sólo como último recurso, para neutralizar esa violencia.